Existe un llamado foco de curas de Madrid que han emitido un mensaje contra la celebración de la JMJ tal como está preparada para la tercera semana de agosto con la presencia del Papa Benedicto XVI.
La libertad de expresión no se le puede negar a nadie, pero quien habla en ese papel debe ser responsable de lo que dice: no se puede afirmar que las empresas colaboradoras lavan dinero negro con el blanco de la sotana del Papa.
Además, si tienen pruebas de sus acusaciones que acudan a los tribunale de justicia y pongan la correspondiente denuncia. Las afirmaciones que presentan son vaguedades panfletarias de los años contra el franquismo.
Y digo esto, porque muchos de los firmantes están jubilados, ingresados en algún geriátrico, o al borde de irse al otro barrio. Son los curas progres de los años sesenta para acá que se han quedado sin evolucionar y piensan que una forma de protestar es mezclar al cardenal de Madrid en un turbio asunto de blanqueo de dinero. Además sin pruebas ninguna.
Los medios de comunicación de la izquierda están ávidos de noticias panfletarias como ésta y les están dando cancha en ellos. Allá éstos con su responsabilidad.
Mi opinión es que debemos dejar que llegue la celebración de la JMJ, venga Benedicto XVI y la multitud de jóvenes que estén presentes serán testigos de los acontecimientos vividos para su vida espiritual y humana. Y la Iglesia de España habrá sido un espejo donde mirarse el mundo entero para organizar otras concentraciones futuras de este contenido pastoral.
Tomás de la Torre Lendínez
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